El aluminio tiene otras ventajas, pero resulta más caro que el PVC, también por tener que llevar RPT. Una de las principales ventajas es la estética, ya que se trata de un material que disfruta de unos acabados mucho más atractivos que los del PVC. Otra de las características de los dos materiales es su durabilidad. Sin embargo, para algunos especialistas es más indicado el aluminio si se desea que dure más a la vista.
Por otra parte, el aluminio no aísla tan bien como el PVC del ruido. El aislamiento acústico también es de gran importancia para algunas personas, por lo cual resulta óptima la instalación del PVC para cerrar ventanas, terrazas y otros espacios.
Los especialistas en carpintería en aluminio y PVC también le facilitan otras muchas opciones en el ámbito del aislamiento. Puede optar por materiales como el policarbonato, el cristal, el panel de sándwich... El cristal es otro de los productos usuales en el sector de los cerramientos. Con el cristal templado (resistente y seguro), se aseguran estructuras tan atractivas como las cortinas de cristal. En este caso, se disponen láminas de cristal sin perfiles que impidan la visión exterior. Cada material para cerramientos se adecua a un espacio y unos requerimientos concretos; los especialistas le ayudan a ofrecerle las mejores opciones.
